Dicen que no hay nada por inventar y que ya está todo dicho. Sin embargo, los niños nos enseñan a mirar el mundo desde sus ojos, desde los ojos de la inocencia. No hay nada más fresco, más repleto de energía y más pleno que observar el mundo desde su prisma.
Os invito a leer esta presentación de "El hormiguero", para que paséis un buen rato y para que nos sirva de recordatorio de que merece la pena mirar el mundo con ojos renovados.
Añado un simpático video para enseñar a los más pequeñines los números hasta el 11.
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